La agroforestería o agrosilvicultura se define como la integración de árboles y arbustos leñosos en los sistemas de producción de cultivos y ganado. Se promueve ampliamente como una herramienta de conservación y desarrollo para capturar carbono, mejorar la fertilidad del suelo y conservar la biodiversidad en las tierras agrícolas, al tiempo que genera beneficios económicos para los agricultores. La agroforestería se promueve a través de una serie de intervenciones, como el desarrollo de la capacidad de los agricultores, el suministro de germoplasma arbóreo y la provisión de seguridad financiera o tenencia de propiedad. Esta revisión examina la evidencia sobre los impactos de cualquier tipo de intervención agroforestal en países de bajos y medianos ingresos (PByMi) en torno a tres variables: productividad agrícola, servicios ecosistémicos y bienestar humano.